Uno de los personajes más memorables de todo el anime no es ni siquiera un protagonista, sino que es un antagonista, ni más ni menos que el poderoso Makoto Shishio de Kenshin, el guerrero samurái. El terror que infunde no se debe únicamente a su aspecto peculiar cubierto con vendas y que le da apariencia de “momia”, va más allá de eso. Tampoco es únicamente por su brutal habilidad en el combate, aunque definitivamente es una de sus cartas más poderosas. Pero lo que en realidad hace temible a este personaje es la filosofía que predica, la cual señala que, en este mundo cruel, el fuerte es el único que sobrevive, a toda costa.
Makoto Shishio como sucesor del gran Hitokiri Battousai, siendo a su vez un temible hitokiri del Bakumatsu, no tenía un estilo definido como tal, y solo se unió a la revolución con tal de demostrar su gran fuerza, capacidad y brutalidad en combate. Es por eso que no se puede delimitar su estilo de lucha en un solo conjunto de técnicas, sino que sus habilidades le permiten combinar numerosos ataques y técnicas para hacerlo un oponente formidable.
Las armas de Makoto Shishio
Una de las espadas más llamativas y especiales en la serie, es la que utiliza Makoto Shishio, la poderosa Mugenjin. Tiene la particularidad de que no sufre desgaste, debido a su capacidad de almacenar el aceite humano de sus víctimas. Por la naturaleza del combate, esta espada es capaz de producir llamas que al cortar generan ardor y gran dolor en los rivales. Aunque hay que mencionar que sufre cierta desventaja en comparación con una katana común, por lo delgado de la hoja de la Mugenjin cuyos cortes no son muy profundos.
Técnicas de Makoto Shishio
Sin duda el miembro más fuerte del Juppongatana es el que posee las habilidades más sorprendentes y sobrehumanas. Además de su peculiar Mugenjin, Makoto Shishio dispone de un arsenal de técnicas temibles que se basan en el fuego y la pólvora. Desde que este fuese traicionado e intentado ser quemado vivo por los imperialistas japoneses, su rango de dolor y su resistencia fueron comprometidos, pero al mismo tiempo desarrolló un entrenamiento riguroso que lo volvió muy fuerte.
Dentro de sus técnicas más importantes se encuentra el “Hommuradama”, una técnica con la que lograba crear con la hoja de su Mugenjin una llama que la cubría en su totalidad, permitiendo asestar golpes con llamas. Otra de sus técnicas especiales es el “Guren-kaina” la cuál era el complemento de la técnica antes mencionada. Para utilizarla de forma correcta, se valía de sus guantes impregnados de pólvora, con los que podía provocar una detonación en el objetivo al que apuntaba. Esta detonación no sólo causaba una quemadura en el torso del oponente, sino que además generaba un impacto que no cualquier adversario podía resistir.
La técnica secreta y final en el estilo de lucha de Makoto Shishio se conoce como “Kaguzuchi”. Sin embargo, esta no pudo concretarse ya que durante el enfrentamiento contra Kenshin Himura, este utilizó el “Amakakeru Ryu-no Hirameki”, el cual interfirió en el ataque de Shishio. Solo se puede intuir que iba a ser una técnica devastadora, ya que se logró observar como la Mugenjin se rodeaba de un torbellino de fuego, con el cual Shishio estaba en la disposición de cortar a su oponente Kenshin.
El arte de la letalidad
A pesar de lo que la mayoría puede pensar en torno al estilo de combate del despiadado Makoto Shishio, este no se limita únicamente a la fuerza física o habilidad detrás de la espada. El factor mental y las tácticas especiales de combate hacen que su estilo de pelea sea todo un arte en sí. Esta combinación de brutalidad con estrategia lo colocan por encima de todos los rivales antagonistas, que simplemente no pueden combinar estas dos grandes ramas del combate.
La eficiencia que persigue Makoto Shishio y el Juppongatana al que lidera es la muestra de lo meticuloso que puede ser este a la hora de llevar a la acción sus planes. Más de diez años tuvieron que pasar después de que fuera traicionado por el gobierno y desde entonces ha ideado la forma de venganza bajo su filosofía de que el más fuerte sobrevive y el más débil simplemente debe ser su alimento. En su convocatoria del Juppongatana no se limitó a reclutar a los más fuertes guerreros sino también a un par de filósofos, estrategas y administradores, demostrando así su intelectualidad por encima de un mero asesino promedio.
El gran maestro táctico
La manipulación y el control emocional con el que ejercía a sus subordinados es una de las cartas más poderosas en el arte táctico de Makoto Shishio. Como estilo de combate, es indispensable contar con una voluntad inquebrantable que sirva de inspiración a otros guerreros, pues de esta forma se asegura una lucha pasional por la causa que se defienda. Makoto Shishio tenía esto claro, por lo que su mente estratégica le brindaba herramientas que sus rivales no poseían y que sumada a su brutal fuerza física, le daban clara ventaja en las batallas.
A todo esto, también hay que sumar la falta de escrúpulos del temible Makoto Shishio, quien demostró en varias oportunidades que no le importaba sacrificar su entorno o incluso sacrificar a sus propios seguidores con tal de alcanzar su objetivo. Esto abriría las puertas para la utilización de tácticas poco convencionales que, a la larga, fueron el gran éxito que tuvo en largos tramos de la historia, saliéndose con la suya en múltiples ocasiones.
La filosofía del más fuerte
Posiblemente el gran poder de Makoto Shishio no se hubiera llegado a manifestar si no hubiese tenido una filosofía intrínseca desde que era muy pequeño. Sabiendo y aceptando que se vive en un mundo cruel, gris y despiadado, decidió afrontar esta cruda verdad a través de la fuerza y la brutalidad. Esto se hace evidente en cada combate, con cada golpe que asesta en donde se percibe el odio que ha cargado por más de una década. Makoto Shishio asegura que en este mundo solo los fuertes sobreviven, una posición extremadamente radical que choca con la filosofía más pacifista y altruista de otros personajes de la serie.
Las distintas creencias son el génesis de los diferentes estilos de combate que se pueden apreciar en Kenshin, el guerrero samurái, por lo que este apartado siempre ha sobresalido al complementarse muy bien con una trama emocionante. La expresión de una filosofía compleja pero nunca vacía, ha llevado a Makoto Shishio a implementar un estilo de combate único, irrepetible y difícilmente replicable, siendo este uno de los antagonistas más temibles en todo el mundo anime.
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