Las impresionantes y épicas batallas en el mundo del anime no existirían sin técnicas y proezas increíbles que los protagonistas son capaces de hacer. En el caso de Kenshin Himura, una de las características importantes es que sus técnicas de combate se basan en estilos que existen en la vida real, haciendo una combinación muy original que emociona a los fans.

La variedad de filosofías, contextos, motivaciones y también traumas de los distintos personajes moldean la forma en la que combaten, siendo el factor psicológico algo vital y algo que los destaca. Estos espadachines basan su valor en la disciplina y habilidad que tienen con sus armas, aunque algunos como Kenshin Himura, lo llevan al límite, entregando las más increíbles técnicas de pelea que veremos a continuación.

El estilo Hiten Mitsurugi Ryu

El tumultuoso camino que Kenshin tuvo que transitar durante su vida dando batallas del más alto nivel contra adversarios sumamente poderosos no se podría haber llevado a cabo sin sus técnicas de combate basadas en el estilo “Hiten Mitsurugi Ryuu”. Kenshin Himura se encargaría de inmortalizar este estilo de combate basado principalmente en la gran rapidez, teniendo que alcanzar la llamada “velocidad de dios”.

La alta exigencia que requiere este estilo de combate se traduce en un desgaste importante en el cuerpo, por lo que físicamente se necesita una condición apegada a la que posee Hiko Seijuro, el maestro de Kenshin Himura, con una altura y musculatura prominente. Sin embargo, Kenshin lograría adaptar su pequeño y delgado cuerpo para dominar varias técnicas e incluso llegar a ser el legendario “Hitokiri Battousai” del período Bakumatsu. En términos generales se podría dividir este estilo de combate en 3 grandes grupos:

  • Rangeki jutsu: Que abarca las técnicas que se emplean en combates sobre suelo.
  • Totsushin jutsu: Abarca técnicas basadas en ataques aéreos.
  • Battou jutsu: Son técnicas enfocadas en el desenvaine de la espada a velocidad extrema. Los ataques siempre inician con la katana dentro de su funda.

Otro de los aspectos distintivos de este estilo es que cada maestro que lo utiliza debe llevar el mismo nombre, por lo que “Hiko Seijuro” más que un nombre, es una especie de “título” que se va heredando de maestro a alumno para resguardar este legendario estilo de combate. También se dice que las personas que practican el Hiten Misurugi Ryuu no envejecen como las “personas normales”, y vemos la prueba irrefutable en el maestro Hiko Seijuro y en Kenshin Himura.

Técnicas del estilo Hiten Mitsurugi Ryu

Kenshin Dibujo

Ryu Kan Sen

Este ataque, como la mayoría del estilo Hiten Mitsurugi Ryu, se basa en la velocidad con la que es ejecutado. Consiste en un ataque de espada regular en el que se debe correr hacia el oponente y dar un giro de 360º durante el cual se desenfunda la espada de la cintura y se lanza un zarpazo de abajo hacia arriba al rival. Cuando el ejecutante cae es importante que sea semiarrodillado, con la rodilla derecha en el suelo, mientras que la otra pierna está flexionada con el pie en el suelo y la espada extendida hacia el cielo, siguiendo una curva imaginaria del ataque. Esquivarlo es extremadamente difícil pues la velocidad con la que se ejecuta es muy alta y aún si algún samurái lograra evadirlo, quedaría en muy mala posición para un contraataque.

Ryu Kan Sen-Tsumuji

Este ataque combina el Ryu kan sen en el aire mencionado anteriormente, teniendo que saltar hacia el enemigo mientras se hace un giro sobre el eje del cuerpo y la misma inercia de rotación es aprovechada para asestar un fuerte golpe al rival antes de caer al suelo. Por lo general sus ejecutores lo realizan después de haber hecho el Ryu Kan Sen normal, aprovechando al máximo la oportunidad de segundo ataque que brinda este especial ataque, con consecuencias devastadoras para quien recibe esta combinación.

Ryu Kan Sen-Kogarashi

Uno de los ataques más mortales, pues se utiliza cuando el oponente ataca directamente con la punta de su espada, entonces se debe dar un giro completo del cuerpo e inmediatamente atinar un golpe a la altura de la nuca o la espalda, resultando prácticamente en la muerte segura del oponente. 

Sou Ryu Sen

El desenvaine más mortal de todos. Se requiere una precisión y técnica altísima para ejecutar este movimiento que consiste en desenfundar a la velocidad de la luz. Se debe correr hacia el rival y hacer el desenfundado para lanzar un golpe de abajo hacia arriba con la espada, pero al mismo tiempo sacar la funda de la espada de la cintura e insertarla en el estómago del rival (o cualquier otra parte de su cuerpo). Este segundo ataque con la funda es prácticamente imposible de evitar o evadir, a menos que el rival sea otro practicante del estilo Hiten Mitsurugi Ryu o un espadachín muy habilidoso. 

Ryu Tsui Sen

En este ataque la importancia reside en la fuerza que se utilice para ejecutarlo. Para realizarlo se debe aplicar un salto hacia el oponente y cuando se está por encima del nivel de este, se lanza un zarpazo de arriba hacia abajo directamente a la cabeza. Otra variante puede ser un golpe al estilo “gancho” con el que la espada vaya en posición horizontal y directamente al cuello. Resulta mortal si se aplica la fuerza necesaria, resultando muchas veces en el degollamiento del rival sin más remedio. 

Do Ryu Sen

Este inusual movimiento se puede realizar en el combate sobre el suelo. Consiste en hacer un movimiento de abajo hacia arriba con la espada, con el que la tierra se va abriendo, formando un pequeño camino enfrente de quien lo ejecuta con dirección al rival. Al mismo tiempo se aprovecha la fuerza del viento generado y se combina con el temblor que se produce en el suelo para entorpecer al rival con las rocas que se levantan del piso y que pueden herir o lanzar lejos al rival. 

Ryu Sho

Este movimiento funciona también como buena defensa contra múltiples armas. Consiste en un movimiento rápido de espada que va de abajo hacia arriba para detener o romper el ataque de un rival. Incluso se puede utilizar en contra del ataque de dos armas simultáneas, como fue el caso de las Kodachis que utilizó Aoshi Shinomori en su batalla contra Kenshin Himura.

Shin So Ku

Más que un ataque o movimiento como tal, este es el término que se utiliza para nombrar a la velocidad que se debe emplear en el estilo Hiten Mitsurugi Ryu. Se podría traducir como “La super velocidad de dios” y ha sido alcanzada por pocos personajes, como Hiko Seijuro, Kenshin Himura y Shougo Amakusa. 

Kuzu Ryu Sen

Esta es una técnica mortal del estilo de combate Hiten Mitsurugi que podría traducir como “El ataque de las 9 cabezas” o como “Ataque de las escamas del dragón”. Se fundamenta en el Sou Ryu Sen, pues es similar, pero en lugar de usar la funda de la espada, se utiliza este segundo movimiento para lanzar 9 golpes mortales: Karatake, kesagiri, sakagesa, miginamgi, hidarinagi, mickiriage, hidarikiriage, sakakaze y tsuki.

Esto se traduce como: Cabeza, hombro derecho, hombro izquierdo, brazo derecho, brazo izquierdo, mano derecha, mano izquierda, en el medio de los dos pies y pecho respectivamente. A pesar de la brutalidad de este ataque, hay que mencionar que existieron dos personajes que sobrevivieron a él: Makoto Shishio en manos de Kenshin Himura y este mismo pero, a manos del maestro Hiko Seijuro.

Amakakeru Ryu no Hirameki

Conocido también como “el principio secreto del Hiten Mitsurugi Ryu” es la técnica máxima de este estilo. En la mayoría de técnicas de la espada siempre se usa el pie derecho como apoyo para desenfundar, pero en esta técnica en particular se debe utilizar el pie izquierdo porque al hacerlo correctamente, se ganan algunos segundos. No hay ataque más veloz que este y a diferencia de otros similares, este cuenta con dos golpes que se deben ejecutar uno inmediatamente después del otro.

El primer ataque es un zarpazo que usa como punto de apoyo el pie izquierdo del ejecutante, no es difícil de esquivar para el rival pues puede detenerse con cierta facilidad, pero al ejecutarse con la fuerza necesaria, creará un vacío en medio de los dos rivales. Este vacío empuja al rival hacia el ejecutante, y con un giro 360º (ahora sí usando de apoyo el pie derecho) el ejecutante puede lanzar el segundo zarpazo que es incluso más poderoso que el primero. El rival queda inmovilizado durante el giro del ejecutante por causa del vacío creado entre ellos, por lo que se le llama “quedar atrapado por las garras del dragón” y es imposible de evadir o bloquear, resultando en consecuencias mortales para quien la recibe.