En el contexto histórico del Japón feudal, la figura del Sensei o maestro resaltaba enormemente, en diferentes ámbitos de la vida, incluyendo los guerreros samurái. Estos no solo representaban figuras de autoridad y destreza en el arte de la espada, sino que solían representar un pilar fundamental en la formación moral y filosófica de sus discípulos. La gran influencia que poseían los maestros espadachines podía trascender por generaciones enteras, y en el caso de la serie Kenshin, el guerrero samurái, el gran maestro Hiko Seijuro XIII o Hiko XIII representa a la perfección la importancia de una figura de autoridad con destreza sin comparación y un alto sentido del valor y los ideales de justicia.
Para entender de mejor manera la complejidad y la profundidad de este pilar en la formación del protagonista, se debe repasar una serie de datos y conceptos relacionados a la trama de Kenshin, el guerrero samurái. Para un correcto desglose, se debe enfocar en quién fue Hiko Seijuro, cuál fue su influencia en el que llegó a convertirse en el más grande Hitokiri de Japón y sobre todo en cuál fue el legado que Hiko entregó para la posteridad gracias a su filosofía y técnicas de combate incomparables.
¿Quién es Hiko Seijuro?
En el universo de Kenshin, el guerrero samurái, el maestro del protagonista es el legendario espadachín cuya habilidad con su arma no se compara con nadie más, recibe el nombre de “Hiko Seijuro XIII” o “Hiko XIII”. Este a su vez, funciona como un “título” o “nombre” que se va heredando con cada nuevo Hiko que surja. Se especializa en el estilo de combate ficticio conocido como “Hiten Mitsurugi-Ryu”. Este estilo de combate resalta por la gran velocidad y la precisión de los movimientos, por lo que este se convierte en uno de los pilares fundamentales en la vida de Hiko y de su discípulo Kenshin Himura.
El gran maestro Hiko es considerado a menudo como el personaje más fuerte en el universo de Kenshin, el guerrero samurái e incluso muchos expertos consideran que hubiese podido hacerle frente a Kenshin en su era dorada como “Hitokiri Battousai”. Sin embargo, la grandeza de Hiko no se limita a su imponente físico y a su destreza con la espada, sino que va más allá, siendo un hombre con vasta sabiduría y con alto sentido de justicia, resultando en una gran influencia para Kenshin desde su infancia. Fue este quien en un inicio acogió a Kenshin luego que perdiera a su familia en un ataque a su villa y no solo eso, le cambió su nombre original “Shinta” por “Kenshin” ya que, en palabras del propio Hiko, “este nombre es más acorde para un espadachín”.
La filosofía y el entrenamiento de Hiko Seijuro
En el mítico estilo de combate del “Hiten Mitsurugi-Ryu” la velocidad es clave, quizás lo más importante, pero no se debe pasar por alto el hecho que para llevar a cabo cada una de las técnicas de este estilo, se necesita una condición física prodigiosa. Puede que Kenshin sea la única excepción a esta premisa, pero en condiciones normales, el gran físico de Hiko Seijuro es una muestra que no cualquiera aguanta el exigente entrenamiento que requiere su estilo de combate.
Por otro lado, debemos mencionar el fuerte sentido de justicia que siempre ha profesado Hiko Seijuro, desarrollando un carácter basado en la sabiduría de los actos, sin actuar por impulsos y sobre todo respetando a los más débiles, incluso llegando a velar por ellos. Esta ideología fue la que impactó a Kenshin, al darse cuenta que podía utilizar la espada para algo más que simplemente matar a diestra y siniestra sin consecuencias mayores. En otras palabras, fue Hiko quien le inculcó a Kenshin una de las lecciones más importantes: El propósito de proteger sin matar.
La gran influencia de Hiko Seijuro XIII
La muestra más clara de la gran y poderosa influencia del gran maestro Hiko Seijuro se puede ver en el protagonista de la serie, Kenshin Himura. Como estudiante, Kenshin experimenta un cambio significativo en su filosofía de vida, en la forma de batalla y en cómo actuar sabiendo que toda acción tiene consecuencias. A lo largo de los años que Hiko mantuvo tutela sobre Kenshin, se evidenció la gran habilidad con la espada, pero sobre todo la destreza física para aguantar un estilo de combate que exige la rapidez y precisión que no cualquiera posee.
Sus grandes habilidades con la espada no es lo único que ofrece, sino también su código moral y determinación para conseguir sus objetivos. No es ninguna casualidad que, en un punto de la trama, cuando Kenshin sabía que no podía enfrentar a un rival, la primera persona en quién pensó para pedir ayuda fue en su maestro Hiko. Esto demuestra la alta estima que Kenshin Himura tenía por su maestro, aunque éste optara por mantenerse al margen de las decisiones personales del Hitokiri Battousai.
El legado de Hiko Seijuro XIII
Aunque el maestro Hiko Seijuro aparece de forma intermitente en la serie, tiene apariciones muy claves para el desarrollo de la trama en general, demostrando la importancia de su influencia, pero sobre todo del legado que representa para su alumno Kenshin Himura. Puntualmente una de las grandes lecciones que deja el maestro Hiko Seijuro es el poder que representa el deseo de vivir, pues le hace entender a Kenshin que para proteger a los que ama, necesita vivir y enfrentarse al rival. Fue a partir de este momento que Kenshin entendió la importancia que tenía su vida y las decisiones que tomaba, dejando a un lado el temor y la incertidumbre para darlo todo por sus seres amados.
El respeto, las lecciones morales y la habilidad en combate que Hiko inculcó en Kenshin persisten en el tiempo y le brindan herramientas para que este pueda hacerle frente al duro camino que ha elegido hacia la redención, y de esta manera, también pueda encontrar la paz interior en una época de grandes cambios en el antiguo Japón.
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