La Casa Wammy es un orfanato muy particular dentro del mundo de Death Note, pues no se trata de un simple refugio para niños sin hogar, sino de una institución creada con un propósito más ambicioso: entrenar a jóvenes prodigios con la esperanza de que uno de ellos sea el sucesor del legendario detective L. Fundado por Quillsh Wammy, conocido también como Watari, este orfanato se encuentra en Winchester, Inglaterra, y es una de las varias instituciones establecidas por Wammy en distintos lugares del mundo.
A diferencia de otros orfanatos, en la Casa Wammy no se brinda únicamente cuidado y educación, sino que los niños son sometidos a un riguroso entrenamiento intelectual con el fin de potenciar sus habilidades deductivas y analíticas. El mayor ejemplo de su éxito es L Lawliet, quien fue el niño más talentoso que pasó por sus instalaciones y se convirtió en el mejor detective del mundo.
Sin embargo, la Casa Wammy no solo produjo mentes brillantes al servicio de la justicia, sino que también dio lugar a rivalidades, envidias y consecuencias imprevistas. Personajes como Near y Mello, criados en este orfanato, jugaron un papel crucial en la cacería de Kira, cada uno con métodos y perspectivas muy distintas. Esta institución, aunque en apariencia noble, plantea interrogantes sobre la ética de entrenar niños con un propósito tan específico y las repercusiones psicológicas que esto puede tener en ellos. Así pues, conozcamos todos los detalles acerca del Orfanato Wammy’s House de Death Note.
¿Cuál era el verdadero objetivo del Wammy’s House?
Aunque la Casa Wammy comenzó como un orfanato para niños superdotados, su propósito evolucionó tras el éxito de L como detective. Con la convicción de que el mundo necesitaba mentes brillantes capaces de resolver los casos más complejos, Watari convirtió la institución en un centro de formación para encontrar al sucesor de L. Los huérfanos más talentosos recibían alias en lugar de nombres reales y, en algunos casos, se les asignaba una letra, reflejando su importancia dentro del orfanato.
Bajo la dirección de Roger Ruvie, el orfanato operaba en segundo plano mientras Watari asistía a L en sus investigaciones. Sin embargo, la muerte de ambos cambió el destino de la institución. Roger se convirtió en el nuevo responsable y tuvo que lidiar con la decisión más difícil: determinar quién de los dos alumnos más prometedores, Near o Mello, asumiría el papel de sucesor de L. Mientras Near aceptó seguir el legado de L a través de la creación del SPK, Mello rechazó la idea de trabajar en equipo y abandonó el orfanato, emprendiendo su propio camino en la mafia.
Cuando Light Yagami descubre la existencia de la Casa Wammy, envía a Aizawa y Matsuda a investigar. Sin embargo, con la muerte de L y Watari, el único que puede proporcionar información es Roger Ruvie, el actual director del orfanato. Aunque revela la existencia de los dos sucesores de L, no conoce sus nombres reales ni tiene fotos de ellos. La única pista que obtiene el equipo de investigación proviene de retratos pintados por Linda, una antigua residente de Wammy’s House que ahora es artista.
Mientras tanto, Mello, consciente de que Kira necesita conocer la identidad y el rostro de sus víctimas, se adelanta a los movimientos de Light. Con el objetivo de evitar que su identidad sea descubierta, rastrea a Near y le exige la única foto que existe de él. Near, previendo el peligro, le entrega la imagen y se asegura de que nadie en el orfanato revele información sobre él.
La lucha contra Kira se intensifica cuando Matt, aliado de Mello, se une a la batalla. Juntos ejecutan un plan para secuestrar a Kiyomi Takada, una pieza clave en la estrategia de Light. Aunque ambos mueren poco después, sus acciones son fundamentales para la resolución del caso. Near, al enfrentar a Light en el desenlace, reconoce que sin la intervención de Mello, él solo no habría podido derrotar a Kira. Al final, Near asume el título de L, mientras que Roger adopta el rol de Watari, asegurando la continuidad del legado de la Casa Wammy.